Mostrando entradas con la etiqueta terremotos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta terremotos. Mostrar todas las entradas

domingo, 17 de abril de 2022

Y tembló la tierra en...

Y un miércoles,18 de abril de 1906, a las 5 y 13 minutos de la mañana, un terremoto que, se piensa, tenía una magnitud de 7,8, rugió, unos sesenta segundos, en San Francisco, llevándose por delante a unas tres mil personas. Aproximadamente 275 millas, de las 800 que tiene la falla de San Andrés, en movimiento. Cinco días después del desastre, los incendios practicamente habían sido extinguidos y ya se comenzaban con las labores de reconstrucción. Unos 30000 edificios, derruidos. En aquellos momentos San Francisco, con sus 350000 habitantes, con una población tres veces superior a la de Los Ángeles, era de las más importantes del país, en tamaño ocupaba el asiento número nueve

https://www.loc.gov/
San Francisco, entre las calles 5.ª y 6.ª en 1906 después del terremoto.

Al prestigioso arquitecto y urbanista Daniel Burnham, pionero en levantar rascacielos y creador, entre otras maravillas, del Flatiron de Nueva York, se le había encomendado precisamente años antes que diseñara un plan maestro para la ciudad, los planes urbanísticos de Chicago o Cleveland, por nombrar algunos, ya llevaban su sello, pero las autoridades sanfranciscanas, que querían ver la ciudad en pie en menos que cantaba un gallo, decidieron que no había tiempo para colocar las virguerías clasicistas que aparecían en su plan y lo desecharon. El acero ganó terreno. Los carpinteros ya hacían el agosto con cinco dólares al día, los albañiles se llevaban seis, y los codiciados fontaneros, siete.  

En 1915 San Francisco ya estaba prácticamente terminada. Para celebrarlo, ese año exposición universal, también conocida como la Exposición Internacional Panamá-Pacifico y que, como reconocemos en el nombre, festejaba que, en 1914, se terminara el Canal de Panamá.

Aquí dejo un viaje en el tiempo por San Francisco, justo cuatro días antes del terremoto. El sonido y el color son añadidos. 

Y una de Trivia: Alaska se lleva la palma en magnitudes, con un 9, 3 en 1964.

A nivel mundial, Chile a la cabeza, con un 9,5. 

lunes, 18 de mayo de 2020

De fallas y fallos.

Y ya que hablamos de calamidades, y que en la zona de Carson City, Nevada, hace unos días se registró un seísmo de intensidad 6,5, hoy, una de terremotos.

Poag, Hawaii, volcano

Gracias a la magia del celuloide, a muchos nos resulta familiar el famoso terremoto de San Francisco. Sucedió un 18 de abril de 1906 y su magnitud, según los expertos, (la escala de Richter y Gutenberg aparece en 1935 y, por tanto, es difícil dar un valor exacto), se encontraba entre los 7, 7  y los 7,9.

Los movimientos sísmicos del país no solo se quedan en la falla de San Andrés, sino que tocan la otra costa. Y en el centro del país, en el valle del Misisipí, en la denominada zona sísmica de Nuevo Madrid, también se dan movimientos sísmicos de una magnitud considerable. Ocho estados son los más proclives a que sufrir esta furia, siendo Oklahoma, el más vulnerable de la lista. Por lo visto, las temperaturas frías de la zona y el suelo blando del valle favorecen la amplificación de la magnitud de la onda. 

Y el panorama que pintan los investigadores no es nada bonito: a esta zona sísmica puede que en menos de 50 años le pegue un terremoto que supere los 8 grados. Y lo peor: el gobierno está poco o nada preparado para afrontar un desastre de esta magnitud. En el 2019 a las autoridades se les ofreció simular un seísmo de 7, 7, el Shaken Fury, (La furia sacudidora) y amablemente dijeron no gracias.

Mitiguemos el susto, si es que se puede, con la falla Wasatch, en la zona del valle de Salt Lake, área que solo ocupa los estados de Utah e Idaho. En caso de que un seísmo nos pillara en uno de ellos, la intensidad del horror, dicen, no superaría los 5,7. Aunque hay voces autorizadas que no se quedan tranquilas con este número y también lo suben a 7,5