Cortesía USDA ARS |
A la ejecutiva de Theranos, Elizabeth Holmes, si le caen años por hacer creer a sus inversores que iba a revolucionar la industria sanitaria con el análisis de una sola gota de sangre, probablemente no serán muchos. Y la culpa la tiene el amor. Holmes ha declarado que su exnovio y número dos de la empresa, Ramesh "Sunny" Balwani, diecinueve años mayor que ella, la maltrataba física y psicológicamente.
Hoy lunes, el jurado se reunirá por primera vez para contrastar opiniones e intenta aclarar si es una estafadora o si la pasión y su amor por el bien ajeno le nublaron los sentidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario